La Neurología Funcional, también llamada Neurología Quiropráctica (ya que actualmente es una formación de postgrado exclusiva para Quiroprácticos Universitarios) es una metodología basada en Neurociencias que comprende tanto la evaluación clínica como el tratamiento del sistema nervioso central y periférico, buscando su rehabilitación y equilibrio para que pueda ejercer sus funciones de manera óptima y eficiente.
Cerebro estimulado, Cerebro fuerte
Bajo este concepto se busca ejercitar al cerebro (tal cual se busca fortalecer un músculo para que se vuelva más fuerte), a través de la estimulación mediante distintas vías (Visual, Vestibular, Olfatoria, Gusto, Propioceptiva, Somatosensorial, etc) con el fin de generar una respuesta adaptativa, y que a través de la repetición y constancia de este estímulo específico se logre un cambio positivo real (Neuroplasticidad) que pueda perdurar en el tiempo, y no solo de forma transitoria.
Neuroplasticidad es el término que describe la capacidad del cerebro para establecer nuevas conexiones con el fin de lograr una nueva función a través de estos cambios neuroplásticos positivos. Lo que busca la Neurología funcional es lograr este recableado y/o refuerzo de una conexión ya existente.
Evaluación Específica, Estimulación Específica
Lograr estos cambios neuroplásticos positivos requiere especificidad. Por lo tanto el profesional neurólogo funcional debe evaluar a través de pruebas específicas cuál es el área cerebral funcionalmente comprometida. Estas pueden incluir pruebas de reflejo, equilibrio, coordinación, visuales, vestibulares, fuerza y funciones cognitivas. Basándose en los resultados, desarrollan un plan de tratamiento que aborda las áreas específicas del cerebro que no funcionan óptimamente y requieren de estimulación.
¿Por qué incluir la Neurología Funcional dentro del proceso de evaluación?
Porque cuando alguien acude a la consulta por rigidez o dolor persistente de semanas, meses o años, a pesar de ya no existir una lesión aguda o herida, lo que estamos percibiendo como dolor es la respuesta de nuestros músculos y tejidos intentando protegerse y evitando el movimiento, comandados por un sistema nervioso con una alteración en su función. ¡Los músculos no se mandan solos!.
Por eso es fundamental evaluar y rehabilitar el sistema nervioso, lograr este recableado y reforzar finalmente este aprendizaje con movimiento funcional y ejercicio. De esta forma el músculo recupera su correcta función y el dolor desaparece.
¡Y no siempre el síntoma será Dolor!
También puede ser inestabilidad, desequilibrio, mareo, vértigo, debilidad o fatiga.